Las reflexiones de Juhani Pallasmaa en La mano que piensa abordan el papel del arte y la arquitectura en la sociedad contemporánea, marcada por el predominio de la tecnología y el consumismo. El autor advierte sobre los efectos de estos factores en la experiencia sensorial y la percepción corporal, señalando cómo la progresiva desvinculación de la dimensión táctil y háptica afecta la espontaneidad creativa. Desde esta perspectiva, plantea la necesidad de restituir la autenticidad de la experiencia humana a través del arte y la arquitectura, integrando los sentidos y reconociendo la incertidumbre como un componente esencial del proceso creativo. Pallasmaa subraya la relevancia de la mano como mediadora entre el pensamiento y la acción, al ser capaz de materializar ideas y expandir la percepción de la realidad. La expresión “la mano tiene sus sueños y suposiciones” enfatiza su papel más allá de la mera función utilitaria, al vincularla con la imaginación y la intencionalidad creadora. En este sentido, la incertidumbre no se presenta como una limitación, sino como un factor que fomenta la exploración y la innovación. La aceptación de la imperfección y la apertura a la ambigüedad se configuran, así, como condiciones indispensables para la generación de nuevas soluciones y expresiones artísticas. En un contexto caracterizado por la homogeneización y la mediatización, Pallasmaa redefine el arte y la arquitectura como herramientas fundamentales para preservar la autenticidad de la experiencia humana, estableciendo una mediación crítica entre el individuo y su entorno.
Pallasmaa: La Esencia del Arte y la Arquitectura en un Mundo Tecnificado
En La mano que piensa, Juhani Pallasmaa examina el papel de la mano en la evolución de las destrezas, la inteligencia y las capacidades conceptuales del ser humano. Su tesis central cuestiona la visión tradicional que la concibe como un mero ejecutor de órdenes cerebrales, argumentando que posee intencionalidad propia y habilidades que trascienden su función instrumental.
El libro desarrolla esta premisa a través de distintos enfoques. En primer lugar, analiza los procesos autónomos e inconscientes implicados en la escritura, la artesanía y la producción artística y arquitectónica, destacando la participación activa de la mano en estas prácticas. Asimismo, introduce la noción de conocimiento tácito, presente en la experiencia sensorial y motriz, diferenciándolo del conocimiento conceptual e intelectual que predomina en la arquitectura. Desde esta perspectiva, Pallasmaa cuestiona la primacía del pensamiento racional en la disciplina y reivindica los procesos corporales como formas legítimas de conocimiento.
Finalmente, examina el papel de la mano en la construcción de la identidad y la experiencia existencial, otorgándole un rol fundamental en la relación del individuo con su entorno. Así, La mano que piensa plantea una revalorización del hacer como vía de acceso al conocimiento y como elemento esencial en la práctica artística y arquitectónica.
Pallasmaa: El Papel de la Mano en el Proceso Creativo
Juhani Pallasmaa sostiene que la mano no solo es una herramienta de ejecución, sino un agente activo en la construcción del pensamiento y la percepción. En La mano que piensa, examina su papel en el desarrollo de las destrezas, la inteligencia y las capacidades conceptuales del ser humano, argumentando que no se trata de un mero instrumento subordinado al cerebro, sino de un órgano con intencionalidad propia, capaz de participar activamente en la generación de conocimiento.
Este conocimiento, de carácter tácito y no conceptual, está ligado a la experiencia existencial del ser humano y se manifiesta a través de los procesos corporales. La mano, en este sentido, desempeña un papel fundamental en la relación del individuo con su entorno y en la construcción de su identidad. En disciplinas como la arquitectura, el dibujo establece una conexión háptica entre el objeto, su representación y la mente del proyectista. Tanto el boceto como la maqueta manual permiten que la forma diseñada emerja en diálogo con la materialidad, facilitando una comprensión intuitiva de las cualidades físicas y espaciales de los materiales.
Asimismo, la interacción manual con la materia contribuye al desarrollo del pensamiento proyectual, al articular una relación recíproca entre la conceptualización y la materialización. La mano no solo ejecuta ideas predefinidas, sino que su contacto con el espacio y los materiales influye en la configuración del pensamiento y en la evolución del diseño. Pallasmaa define esta capacidad como una sabiduría encarnada, derivada de la experiencia sensorial y de la interacción corporal con el entorno, lo que otorga a la mano un papel esencial en los procesos creativos.
Crítica a la Percepción del Cuerpo en la Cultura Occidental
Juhani Pallasmaa cuestiona la relación ambivalente que la cultura occidental mantiene con el cuerpo en el contexto del consumismo contemporáneo. Por un lado, se fomenta su estetización y erotización, reduciéndolo a un objeto de exhibición y consumo. Por otro, la inteligencia y la creatividad se conciben como cualidades autónomas e independientes del cuerpo, lo que refuerza la dicotomía entre lo físico y lo intelectual.
Esta separación se manifiesta en el ámbito educativo y profesional, donde el conocimiento teórico y conceptual se sitúa por encima de la experiencia corporal. La cultura contemporánea instrumentaliza el cuerpo como un medio de identidad y presentación personal, vinculado a su atractivo social y sexual, sin reconocer su papel fundamental en la existencia y la construcción del conocimiento.
En la tradición occidental, las capacidades intelectuales, emocionales y creativas han sido históricamente abordadas al margen del cuerpo. Aunque la educación incorpora actividades físicas, rara vez se reconoce la interdependencia entre la experiencia corporal y el desarrollo cognitivo. Mientras que el deporte y la danza se valoran como disciplinas específicas, su relación con el pensamiento y la creatividad permanece al margen del discurso educativo dominante. La primacía del conocimiento conceptual, intelectual y verbal sobre el conocimiento tácito y sensorial refuerza la disociación entre el pensamiento y la acción, limitando una comprensión más integrada de la realidad.
Impacto de la Tecnología en la Percepción Sensorial
Juhani Pallasmaa sostiene que la tecnología ha transformado la percepción sensorial del mundo, modificando la manera en que los individuos experimentan su entorno. Esta alteración afecta la relación entre el ser humano, el espacio y la percepción corporal, al reducir la interacción directa con el mundo material y privilegiar experiencias mediadas tecnológicamente.
En la era digital, la progresiva alineación y materialización del espacio interior y exterior restringe la experiencia háptica y táctil. La omnipresencia de dispositivos tecnológicos media la relación con el entorno, debilitando la conexión sensorial con la materialidad. La cultura contemporánea, marcada por la obsesión por la novedad y la singularidad, ha reconfigurado la manera en que se valoran los fenómenos artísticos y espaciales, haciendo a los individuos más susceptibles a la manipulación y erosionando la percepción de la corporalidad como fundamento de la experiencia humana.
Asimismo, la producción industrial en serie, el consumo acelerado y la proliferación de entornos digitales han desplazado la percepción directa del mundo físico. La vida cotidiana transcurre en espacios cada vez más mediados tecnológicamente, lo que provoca una desconexión progresiva entre el cuerpo y su entorno inmediato.
En este contexto, la educación sigue privilegiando el conocimiento conceptual y verbal sobre el conocimiento táctil y experiencial. La primacía del análisis abstracto y racional sobre la intuición y la percepción sensorial refuerza la separación entre pensamiento y acción, debilitando la capacidad de comprender el mundo desde la experiencia corporal directa.
Relación entre el Ojo, la Mano y la Mente en el Proceso de Diseño
Juhani Pallasmaa plantea que el ojo, la mano y la mente operan de manera integrada en el proceso creativo, articulando percepción, memoria y experiencia sensorial en la concepción del diseño arquitectónico. En este proceso, la atención del arquitecto oscila constantemente entre distintos niveles de representación—desde la planta hasta la sección y los detalles constructivos—en un flujo continuo de exploración y ajuste.
La mano actúa como mediadora entre el pensamiento y la acción, permitiendo que las ideas adquieran forma concreta a través de su interacción con el material. A su vez, el pensamiento se adapta y evoluciona en respuesta a esta acción, estableciendo una relación recíproca entre conceptualización y materialización. Este vínculo no es exclusivamente visual, sino que involucra también la dimensión táctil y experiencial. La experiencia arquitectónica, por tanto, se enriquece mediante la activación simultánea de múltiples sentidos, donde la vista, el tacto y la propiocepción colaboran en la construcción de una comprensión más profunda y holística del objeto y del espacio.
El dibujo y el boceto constituyen expresiones directas de la experiencia vital del arquitecto. La percepción no opera de manera aislada, sino que se alimenta de la memoria y de una construcción subjetiva del mundo, trascendiendo la mera representación del objeto. Pallasmaa, en sintonía con Jean-Paul Sartre, enfatiza que el proceso creativo no se limita a registrar o reproducir visualmente un objeto, sino que genera una imagen cargada de significado. De la misma manera que un pintor no se limita a representar una casa, sino que construye una casa imaginaria que conserva la ambigüedad propia de las casas reales, el arquitecto configura espacios que trascienden la representación literal. La creatividad arquitectónica se nutre de la experimentación y el juego, a través de los cuales se descubren nuevas soluciones formales y espaciales, así como valores estructurales y simbólicos que otorgan profundidad al proyecto.

La Relación entre la Mano y la Creatividad
Juhani Pallasmaa sostiene que la afirmación “la mano tiene sus sueños y suposiciones” subraya el papel activo de la mano en el proceso creativo. Más que un instrumento pasivo, la mano posee intencionalidad, memoria y habilidades propias, estrechamente vinculadas con la imaginación y la cognición.
Su función no se limita a la ejecución, sino que participa activamente en el pensamiento. Cada movimiento implica una dimensión cognitiva, y cada gesto conserva el rastro de la imaginación y la memoria táctil. Al interactuar con el mundo, la mano integra simultáneamente la vista, el tacto y otros sentidos, enriqueciendo la experiencia perceptiva y favoreciendo una comprensión más profunda del entorno.
La sensibilidad táctil desempeña un papel fundamental en la experiencia humana, al establecer un vínculo directo con la materialidad y generar conocimiento a través del contacto físico. Esta interacción no es únicamente funcional, sino que también despierta emociones y estimula la creatividad, fomentando una relación sensorial y afectiva con el entorno.
Además, la mano registra y refina experiencias mediante la memoria muscular. El acto de dibujar, por ejemplo, no se reduce a un proceso visual, sino que involucra la memoria cinestésica, en la que la repetición de los gestos deja una huella en el cuerpo. Desde las primeras expresiones artísticas en las pinturas rupestres, la mano ha sido un medio de comunicación simbólica, revelando la imaginación y la sensibilidad humana.
Pallasmaa define las obras de arte como manifestaciones corporales que expresan conocimientos existenciales profundos, estableciendo un vínculo entre el creador y su mundo interior. La creación artística no solo delimita la relación entre el individuo y su entorno, sino que también funciona como un puente entre la experiencia subjetiva del artista y la percepción del espectador, el oyente o el habitante.
Asimismo, el autor subraya la existencia de un conocimiento silencioso e intuitivo inherente a la experiencia humana, una forma de saber que se manifiesta a través de la corporeidad y que encuentra en la mano un medio esencial de expresión. Lejos de ser un mero ejecutor de órdenes cerebrales, la mano posee su propia inteligencia, influyendo en el proceso creativo y en la materialización de las ideas.
Relación entre la Incertidumbre y el Proceso Creativo
Juhani Pallasmaa concibe la incertidumbre como un elemento esencial del proceso creativo, no solo como un factor que acompaña la exploración artística, sino como un estímulo que la enriquece y la expande. Lejos de representar un obstáculo, la incertidumbre se configura como una condición necesaria para la creatividad y la innovación.
Siguiendo la reflexión de Joseph Brodsky, Pallasmaa argumenta que la incertidumbre alimenta la inspiración y potencia la curiosidad. No constituye una carencia, sino un estado que impulsa la búsqueda de nuevas perspectivas y posibilidades. La imposibilidad de alcanzar la perfección es inherente a la creación y se manifiesta de manera particular en la producción artesanal, donde cada obra implica un proceso continuo de revisión, ajuste y transformación. En este contexto, el error no es una falla, sino una oportunidad para el aprendizaje y la evolución del proyecto.
El proceso creativo adquiere así un carácter exploratorio. Al igual que en un viaje donde los resultados no pueden predecirse con certeza, la creatividad se desarrolla a través de la experimentación y la apertura a lo inesperado. En el arte y la arquitectura, la incertidumbre no paraliza, sino que activa la imaginación y promueve la innovación. La capacidad de tolerar la ambigüedad y la falta de definición es crucial para evitar la rigidez conceptual y permitir la emergencia de nuevas ideas.
Por esta razón, Pallasmaa enfatiza la importancia de desprenderse de la idea inicial y aceptar la transformación del proceso creativo. Lejos de seguir un camino lineal, la creatividad se nutre de desvíos, replanteamientos y direcciones imprevistas, configurándose como una práctica en constante evolución.
La Tarea Fundamental del Arte según Juhani Pallasmaa
Para Juhani Pallasmaa, la función esencial del arte es preservar la autenticidad de la experiencia humana en un mundo marcado por la producción en serie y la homogeneización cultural. Frente a la progresiva estetización superficial de la realidad, el arte debe resistir esta tendencia y recuperar la profundidad y singularidad de la percepción. Desde esta perspectiva, Pallasmaa plantea una serie de consideraciones conceptuales sobre el papel del arte en la sociedad contemporánea:
Rescatar la diferenciación y articular la cualidad del espacio existencial. En lugar de contribuir a la aceleración del tiempo y a la trivialización de la experiencia, el arte debe ralentizar la percepción, generar momentos de pausa y preservar la diversidad y profundidad de la vivencia humana.
Proporcionar una base existencial para la condición humana. En un contexto dominado por la cultura mediática y la manipulación de la información, el arte debe salvaguardar la autonomía de la experiencia individual, ofreciendo un marco de significado que ancle la identidad humana en una comprensión más profunda de su existencia.
Preservar y defender el silencio. En una era saturada de estímulos visuales y auditivos, el arte debe servir como refugio del ruido contemporáneo, creando espacios para la introspección y el pensamiento crítico.
Reflejar la realidad a través del artefacto artístico. Históricamente, el arte ha sido un medio para interpretar y cuestionar la realidad. En la contemporaneidad, expresa experiencias de alienación, angustia e inhumanidad, funcionando como un espejo crítico de la sociedad.
Investigar nuevos ideales y modos de percepción. Más allá de representar la realidad, el arte debe expandir los límites de la percepción y la experiencia, explorando nuevas formas de entender y relacionarse con el mundo.
Mediar entre el individuo y su entorno. La arquitectura, en particular, desempeña un papel fundamental en la construcción de significados, no solo organizando el espacio, sino también estableciendo un vínculo entre el ser humano y su contexto, proporcionando un horizonte de comprensión de la existencia.
Conservar las diferencias de significado. En un mundo donde los valores tienden a diluirse en la uniformidad, el arte y la arquitectura deben mantener criterios de calidad sensorial y experiencial, asegurando que la riqueza de significados no se pierda en la banalidad.
Cuestionar los discursos dentro de la propia disciplina. Pallasmaa critica la tendencia del arte contemporáneo a centrarse en debates internos y representaciones abstractas desvinculadas de la vida real. Considera que el arte no debe ser un discurso autorreferencial, sino mantener una relación activa con la experiencia humana.
Desde esta perspectiva, el arte y la arquitectura no solo cumplen una función estética, sino que también configuran el modo en que el ser humano experimenta y comprende su realidad, estableciendo un equilibrio entre percepción, significado y existencia.
Conclusión
Las reflexiones de Pallasmaa aportan una perspectiva crítica sobre el arte y la arquitectura en la era digital, destacando la importancia de la experiencia sensorial, la incertidumbre creativa y la conexión entre cuerpo y mente. Desde esta visión, se invita a reconsiderar la relación con el mundo y a explorar nuevas formas de expresión artística que preserven la riqueza de la experiencia humana. Para Pallasmaa, el arte cumple la función de mediar entre la realidad interior del individuo y su entorno, asegurando la permanencia de su singularidad y profundidad.
@tecnne
Fotografías: Portada: © Adolfo Vera / Interior © Arthur Tintu
TECNNE | Arquitectura y contextos ©Marcelo Gardinetti 2021 Todos los derechos reservados.
El contenido de este sitio web está protegido por los derechos de propiedad intelectual e industrial. Salvo en los casos previstos en la ley, su reproducción, distribución, comunicación pública o transformación sin la autorización del titular de los derechos es una infracción penalizada por la legislación vigente. – Justificación del uso de imágenes y fotografías: – se utilizan las fotografías porque tratan de una obra artística y o arquitectónica significativa – la imagen solo se utiliza con fines informativos y educativos – la imagen está disponible en internet – la imagen es una copia de baja resolución de la obra original y no es apta para uso comercial – En todos los casos se menciona el autor –